Y en parte me parte la idea de que deba marcharme, pero tarde o temprano tenia que pasar. No puedo prometer que este tema vaya a dejar de asomar por aqui, porque como ya he dicho muchas otras veces esta es mi valvula de escape, el sitio donde acudo cuando tengo ganas de escapar del mundo, el lugar donde me escondo cuando no quiero que nadie me vea.
No es un adios, ni un hasta luego, es simplemente...alargar la periodicidad con la que pensar en que fue lo que nos llevo a esta situacion.
Pero es inevitable que sigan apareciendo pequeñas fisuras tuyas, como la tibia luz que consigue penetrar por debajo de la puerta en la sellada oscuridad de mi habitacion. No es lamento, ni sentimiento, no se trata de tristeza ni de melancolia, pena o nostalgia...es simplemente echar de menos.
Asi es y asi sera siempre...aunque no me entiendan los cuerdos...